miércoles, 26 de agosto de 2009

El campo argentino convoca una nueva huelga contra la presidenta Fernández


El campo argentino ha vuelto a levantarse en pie de guerra contra el Gobierno de Cristina Fernández y ha anunciado a última hora del martes (hora española) la convocatoria de una huelga de siete días, que comenzará este próximo viernes, para protestar contra la política agrícola del Ejecutivo, según han anunciado los líderes de las cuatro principales asociaciones agrarias del país en una conferencia de prensa.

La protesta implicará la congelación de la venta de cereales, algo de suma importancia en Argentina, uno de los principales exportadores de maíz del mundo, y de productos cárnicos. La huelga vuelve a desempolvar un conflicto enquistado y que ha condicionado buena parte de los últimos dos años de legislatura de Cristina Fernández.

Carlos Garetto, uno de los líderes agrarios, ha asegurado en rueda de prensa que la huelga no hace sino expresar "el malestar de los productores del campo y la situación crítica en las provincias, que está creciendo y empeorando", ha advertido.
Veto de la presidenta

Los agricultores, que en anteriores protestas bloquearon carreteras y desabastecieron los mercados de las principales ciudades de productos de primera necesidad, se movilizan esta vez contra la votación aprobada la pasada semana en el Congreso y que prolonga los poderes de la presidenta sobre las tasas a las exportaciones del grano, el meollo del conflicto.

La gota que ha colmado esta vez el vaso del descontento ha sido la decisión del Gobierno de Cristina Fernández de eliminar algunos beneficios arancelarios que habían sido aprobados por las dos Cámaras del Congreso la semana pasada en el contexto de la denominada ley de emergencia agropecuaria.

La presidenta vetó la ley por considerarla "pésima" y de "imposible cumplimiento" en materia impositiva, según explicó el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. La normativa prevía rebajas impositivas durante 180 días en concepto de ayudas a agricultores afectados por la sequía en 37 municipios de la provincia de Buenos Aires, la más rica del país.

Sin embargo, las patronales agropecuarias consideran estas medidas "insuficientes" y exigen rebajas de los impuestos a la exportación de granos, en especial la soja, que ya motivó la cadena de huelgas y cortes de carreteras que llevaron a cabo el año pasado.

Irak: Fallece uno de los más importantes líderes chiíes


Abdulaziz al Hakim, líder de uno de los grandes grupos políticos chiíes y de una importante dinastía religiosa iraquí ha fallecido hoy de cáncer a los 59 años, según ha anunciado su líder parlamentario. Su partido, el Consejo Supremo Islámico Iraquí, que forma parte de la coalición de Gobierno iraquí junto con el partido Dawa del primer ministro Nuri Al maliki, anunció ayer que concurriría a las elecciones legislativas en otra coalición.


Jalal al-Din al-Sagheer, líder parlamentario del Consejo Supremo Islámico, ha informado de la muerte en Teherán del líder chií, que heredó el cargo al frente del partido en 2003 tras la muerte de su hermano, el gran ayatolá Muhammad Baqer al Hakim, en un atentado con coche bomba. Se espera que sea su hijo, Ammar, el que le suceda como líder de la formación. Al Hakim se encontraba en Teherán para recibir tratamiento.

Su muerte añade aún más incertidumbre al equilibrio político iraquí de cara a las elecciones del mes de enero. El Consejo Supremo Islámico forma parte de la coalición chií que gobierna Irak y que también incluye al partido Dawa de Al Maliki. No obstante, el Consejo anunció esta semana que concurriría a las elecciones en una nueva alianza sin el partido de Maliki.

El Consejo Supremo Islámico se convirtió en una de las fuerzas políticas más importantes iraquíes tras la caída en 2003 del régimen de Sadam Husein, que beneficiaba a la minoría suní iraquí. Fundado en Irán, muchos de sus líderes vivieron exiliados en el país vecino hasta la caída del dictador y su milicia, las Brigadas Bader lucharon contra Sadam a finales de los 80 y principios de los 90.

Cuando Sadam fue depuesto en abril de 2003, Al Hakim se encontraba entre los 25 miembros que constituyeron el Consejo de Gobierno, una especia de gobierno de transición, nombrado por Paul Bremen.

Todo el poder para el pueblo

Nueva York celebra la iconografía de los Panteras Negras más allá de su mensaje

"¡Todo el poder para el pueblo!". Así arrancaban las reuniones de los Panteras Negras hace 40 años. Y aunque a muchos les suene anacrónico, hay quien todavía cree en el poder de esta frase. Por ejemplo, el artista y activista Emory Douglas, a quien el New Museum de Nueva York dedica una retrospectiva hasta el próximo 18 de octubre.

Es lógico que su credo sigan siendo las palabras con las que los Panteras Negras abrían todas sus reuniones allá por los años sesenta y setenta.

Douglas fue ministro de cultura de aquella organización políticamente revolucionaria que reivindicó derechos básicos para los afroamericanos -desde escuelas a comida, sanidad o vivienda- y que fue fulminada por el Gobierno de Nixon. Fue uno de los pocos dirigentes que sobrevivió a asesinatos y encarcelamientos auspiciados por el FBI y, para su sorpresa, su trabajo como ilustrador del diario semanal Black Panther, con el que este grupo propagaba sus ideas, se ha convertido en obra de arte:

"Ahora el mensaje puede llegar a más gente. Quienes dirigen estas instituciones son más progresistas que antes y son ellos los que me han buscado a mí. Nunca imaginé que llegaría a un museo, pero es muy positivo porque, aunque los cambios no salgan de lugares como éste, pueden salir de la gente que ahora visita un museo y hace tres décadas jamás lo hubiera pisado".

Douglas, de 66 años, cree que muchas de las reivindicaciones que pueblan sus litografías e ilustraciones siguen siendo igualmente válidas hoy: "Aunque tengamos un presidente de raza negra, que es un gran paso, seguimos siendo penalizados por el color de piel. La sociedad estadounidense sigue siendo racista, basta con abrir los ojos".

En persona, Douglas es un señor alto, corpulento, de mirada sonriente, con un gran sentido del humor y de muy buen ver. Resulta difícil imaginárselo empuñando el fusil y con el rostro amenazador de muchos de los personajes que pueblan su iconografía. "Era una época de lucha", dice.

En los 165 carteles, litografías, dibujos y periódicos que componen la muestra Emory Douglas: Black Panther hay imágenes de hombres y mujeres armados sobre las que se pueden leer frases como: "Somos 30 millones de personas fuertes y armadas. Y somos conscientes de nuestra situación y estamos decididos a cambiarla. Y no tenemos miedo".

También hay collages denunciando la criminalización de sus líderes, como el que muestra a Bobby Seale, co fundador de los Panteras Negras, en una silla eléctrica. En él se puede leer: "Los fascistas ya han decidido como asesinar a Bobby Seale".

Él mismo fue uno de los muchos líderes de la organización que fueron arrestados bajo acusaciones de lo más peregrinas. "Éramos molestos. Nos demonizaron porque decíamos la verdad".

Obama confía a Bernanke la salida de la crisis al frente de la Reserva Federal


Barack Obama confía en Ben Bernanke. Y tampoco puede permitirse cambiar de general en plena batalla. Por eso propuso ayer al Congreso de EE UU que le confirme para seguir cuatro años más al frente de la Reserva Federal (Fed), el banco central más poderoso del mundo. Su misión: desmontar la máquina de hacer dinero puesta en marcha tras el colapso de Lehman Brothers hace un año y sacar a la economía de la Gran Recesión sin provocar más sobresaltos en los mercados.

No será fácil. Estados Unidos saldrá de la recesión a final de año, pero cerrará 2009 con una caída anual del 2,9% y un par de problemas notables. El paro llegará al 10% al final del ejercicio, una cifra insólita para la economía norteamericana; y el déficit se dispara hasta 1,6 billones de dólares (1,1 billones de euros, algo más de la riqueza que produce España en un año entero), el 11,2% del PIB.

Obama no fue parco en elogios. Destacó la calma, el buen juicio, el temperamento, el coraje y la creatividad que mostró Bernanke frente a la mayor crisis en ocho décadas, cualidades que, según el presidente, "pusieron freno a la caída libre" en la que entró la economía. "Como experto de la Gran Depresión, estoy seguro de que nunca imaginó que debería prevenir otra", ironizó. La mayoría de los economistas apostaba por Bernanke, aunque con menos fanfarria: no todas sus decisiones en los dos últimos años son indiscutibles. La caída de Lehman Brothers -atribuible también al Tesoro estadounidense- es uno de los grandes errores de política económica de los últimos años.

La decisión de Obama, aunque predecible, generó cierta sorpresa en Wall Street por la temprana fecha elegida, a cinco meses de que venza su mandato. Además, se produjo en plenas vacaciones del presidente de EE UU, que nunca se había pronunciado tan claramente a su favor. Obama apuesta así por la continuidad del hombre nombrado por George Bush al frente de la autoridad monetaria.

El presidente lanzó un nuevo mensaje de optimismo y habló de signos de estabilización en la economía, pero advirtió de que "estamos aún muy lejos" de la recuperación. Por ese motivo, explicó, "necesitamos que Bernanke mantenga el trabajo que está haciendo". El presidente de la Fed expresó su gratitud por la "confianza" mostrada por Obama y afirmó que ayudará a promover que "las oportunidades vuelvan a florecer".

Los mercados dieron la bienvenida al anuncio, que despeja dudas sobre la línea del banco central en los próximos años. El Dow Jones abrió subiendo un 1% -aunque al cierre la ganancia se moderó al 0,32%-, también impulsado por el alza del precio de la vivienda entre mayo y junio y el repunte de la confianza en agosto. En el mismo tono se movió Europa, con un alza del 1,1% en el Ibex y subidas generalizadas, algo inferiores, en el resto de parqués.

El respaldo de Obama no garantiza la reelección de Bernanke. La pelota está en el tejado del Capitolio, y los congresistas han expresado dudas y fuertes críticas durante el último año por no haber prevenido la crisis, y por la lentitud al actuar cuando el colapso de las hipotecas subprime empezaba a salpicar a la economía real. Christopher Dodd, presidente del comité bancario del Senado, anunció que el examen de Bernanke ante el Capitolio será "duro y exhaustivo". "Tengo serias dudas sobre el éxito de la Fed a la hora de proteger a los consumidores", dijo el senador demócrata.

El proceso de reelección se verá influido por el tempo político. El examen al arquitecto de la respuesta anticrisis más drástica en los anales de la Fed se hará en plena negociación de la reforma del marco regulador del sector financiero, que se construye sobre dos pilares: reforzar los poderes de la Fed y crear una agencia de protección del consumidor. Tanto los demócratas como los republicanos se muestran reticentes a concentrar tantas funciones en el banco central por el temor a que pierda su independencia. Respecto a la agencia para prevenir prácticas abusivas en las finanzas, los congresistas la apoyan, pero Bernanke no. Pese a ese choque -y pese a que se le considera demasiado intervencionista-, se da por descontado que pasará el examen, porque es la opción que crea menos inquietud ante la crisis actual y porque los republicanos no se opondrán a un hombre que procede de sus propias filas.

El trabajo que tiene por delante es complicado. Cuando tenga claro que la recuperación es sólida, deberá empezar a desmontar de forma gradual los estímulos sin generar riesgos de recaída. La reactivación, además, puede verse lastrada por el déficit público, que según la Oficina de Administración y Presupuesto -adscrita a la Casa Blanca- alcanzará 1,6 billones de dólares este año y 1,4 billones en 2010. Las anteriores previsiones eran peores, pero esa rebaja no despeja la incertidumbre para sacar adelante planes clave de la Administración Obama, como la reforma sanitaria.

EE.UU.: Alto mando pide más tropas para Afganistán


El alto mando de Estados Unidos en Afganistán afirma que carece de soldados suficientes (hay 100.000, de los que el 56% son estadounidenses) para luchar con éxito contra los talibanes, aunque reconoce que libran una guerra que no podrán ganar.

Sus diplomáticos, como Richard Holbrooke, enviado especial del presidente Barack Obama, tratan de resolver el lío de unas elecciones que deberían haber otorgado legitimidad a la parte política de la estrategia, y que siguen sin resultados (ni de participación) cuatro días después de celebrarse. Las reuniones con los principales candidatos son constantes en la Embajada de EE UU y la calle de Kabul huele el tongo.

“Washington tiene que cambiar de estrategia. Está aplicando criterios de hace 30 años en un país y en una sociedad que han sido destrozados por las guerras. Si [Hamid] Karzai sigue en la presidencia no habrá paz con los talibanes porque él es parte del problema. Si ganara Abdulá, sería peor: habría enfrentamientos entre las etnias”, asegura Ramazán Bashardost desde su tienda plantada desde hace seis años delante del Parlamento y que es el tercer candidato más votado si se confirman las encuestas previas realizadas por un instituto norteamericano.

“Los talibanes ganaron la guerra en 1996 y echaron a los señores de la guerra que habían destruido Afganistán. En 2001 fueron expulsados a su vez por los norteamericanos y ahora tratan de recuperar el poder. Lo que ha hecho muy mal Estados Unidos y la comunidad internacional es apostar por los señores de la guerra. No se han apoyado en gente limpia sin relación con el pasado”, añade Bashardost, muy popular pese a pertenecer a la minoría hazara (9% de los afganos).

Los mandos militares estadounidenses trabajan desde hace meses en lo que denominan nueva estrategia que, de momento, incluye recetas de siempre: el envío de más tropas para revertir una situación que, según admiten ante las cámaras, se ha deteriorado en los últimos meses. Así se lo ha pedido el general norteamericano Stanley McCrystal, jefe de la Fuerza Internacional de Asistencia y Seguridad (ISAF) que encabeza la OTAN, a Holbrooke, quien visitó este fin de semana los cuatro centros regionales de mando: Kandahar, Herat, Mazar-i-Sharif y Bagram, según informó The New York Times. No se sabe si la petición incluye cifras y si afectará a otros países, como España, adscritos a ISAF.

El enviado de la ONU, Kai Eide, reconoció ayer, cuatro días después de celebrarse las elecciones presidenciales, la existencia de algunos problemas y pidió prudencia a los candidatos. Está previsto que la Comisión Electoral Independiente anuncie hoy los primeros resultados parciales de algunas provincias.

Ahmad Zia es un periodista afgano que está indignado con las elecciones. “Si gana Karzai y el fraude es tan evidente se van a producir levantamientos, tal vez no de forma inmediata, pero la situación se puede poner muy fea para las tropas extranjeras que empiezan a ser percibidas como parte del problema”.

“Afganistán es un narcoestado [produce el 93% de la heroína mundial] que está en manos de los señores de la guerra. Obama debería cambiar a su embajador en Kabul junto a todo su equipo. Necesita una mirada completamente nueva, necesita otros asesores. Irak fue el desastre de George Bush, que le llevó a perder las elecciones. Si Obama sigue enviando tropas, Afganistán será su desastre; le hará perder las elecciones”, dice Bashardost. “Todo el esfuerzo de sus contribuyentes, toda la sangre de sus soldados, incluida la de los españoles, no está sirviendo de mucho porque no ha modificado la vida diaria de los afganos”.


Karzai aumenta ventaja sobre Abdulá en conteo de votos afganos


El presidente Hamid Karzai amplió su delantera frente a su rival más importante de los comicios afganos, después que las autoridades electorales difundieron el miércoles más resultados parciales, con lo que el presidente quedó más cerca del umbral del 50%, que le permitiría evitar una segunda vuelta electoral entre ambos candidatos.

Las cifras más recientes pusieron a Karzai con 44,8% de los sufragios, mientras el ex canciller Abdulá Abdulá tiene 35,1%. El conteo se basa en los números reportados por el 17% de las casillas electorales en todo el país, lo que significa que los resultados finales podrían cambiar radicalmente todavía.

Los funcionarios ofrecerán más cifras parciales en los próximos días, pero los resultados certificados finales no estarán listos sino hasta mediados de septiembre por lo menos, después de que se hayan investigado decenas de quejas de fraude grave.

La baja asistencia de votantes y las alegaciones de presunto fraude han ensombrecido la elección. Abdulá ha acusado a Karzai de fraude generalizado, incluyendo la inserción tramposa de papeletas en las urnas y la intimidación a votantes, señalamientos que el equipo de Karzai ha negado.

Millones de afganos acudieron a votar el jueves en la segunda elección presidencial directa que haya vivido el país. Los milicianos lanzaron decenas de ataques en todo el país, obligando al cierre de algunos sitios de votación y al parecer afectando la asistencia.

Este verano boreal ha sido el más violento en Afganistán desde la invasión militar estadounidense de 2001. El presidente Barack Obama ordenó el envío de 21.000 soldados adicionales al país este año, en parte para ayudar a brindar seguridad en las elecciones, pero la violencia ha seguido aumentando.

El Talibán negó el miércoles cualquier responsabilidad por un ataque enorme con explosivos el martes que mató a por lo menos 43 personas e hirió a 65 en la ciudad más grande del sur de Afganistán.

La explosión en forma simultánea de cinco vehículos cargados de explosivos en una zona del centro de Kandahar ocurrió dos horas después de que se difundió el primer lote de resultados de la elección. Los rescatistas todavía estaban rescatando a personas heridas el miércoles temprano. La explosión ocurrió en un distrito que incluye instalaciones de la ONU y una oficina de los servicios afganos de espionaje.