Santiago de Chile, 13 oct (EFE).- Los líderes estudiantiles de Chile Giorgio Jackson y Camila Vallejo tiene previsto viajar hoy a Europa para reunirse con representantes del Parlamento Europeo, de la OCDE y de la ONU y exponer las causas y demandas de las movilizaciones que mantienen desde hace cinco meses.
Una portavoz de la Universidad de Chile (Fech) dijo hoy a Efe que el viaje está orientado a internacionalizar el movimiento, después de que hace una semana se rompiera el diálogo con el Gobierno de Sebastián Piñera y sin que por el momento se observe un camino para solucionar el conflicto.
Junto a Jackson, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (Feuc), y Vallejo, su colega de la Universidad de Chile, viajará también el vicepresidente de este último centro de estudios, Francisco Figueroa, dijo la portavoz.
Su periplo incluye visitas a Francia, Bélgica y Suiza, aunque hasta el momento no se ha divulgado información detallada sobre el orden y las fechas de esas reuniones.
Los dirigentes se entrevistarán con miembros del Parlamento Europeo, de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) y de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), de la que Chile forma parte.
Además, se entrevistarán con Stéphane Hessel, uno de los redactores de la Declaración Universal de Derechos Humanos y autor del libro "¡Indignaos!", que inspiró el movimiento social surgido en España hace cinco meses.
Se espera asimismo que participen en una manifestación en La Sorbona, organizada por la Unión Nacional de Estudiantes Franceses.
También sostendrán un encuentro con representantes del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas y darán una conferencia en una universidad de Ginebra.
Los estudiantes prevén estar de regreso en Santiago el próximo martes, primer día de la doble jornada de movilización convocada por los universitarios para el 18 y 19 de octubre con la que pretenden seguir presionando al Gobierno para obtener sus demandas.
Los jóvenes piden el establecimiento de una educación pública, gratuita y de calidad mediante una reforma del sistema vigente desde la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) que obliga a los estudiantes a asumir grandes deudas para poder costear sus estudios.
Los estudiantes piden la gratuidad universal en la educación y se niegan a dar marcha atrás en sus demandas, pero el Gobierno, que ha rechazado presentar una nueva propuesta, se opone a la gratuidad total y acepta solo concederla, a través de becas, a los grupos más pobres.
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