viernes, 16 de marzo de 2012

CRUCITAS, COSTA RICA: CORTE ORDENA EMBARGO DE GARANTÍA AMBIENTAL A EMPRESA MINERA


Costa Rica, un país que se enorgullece de su conservación ambiental, tiene algo más para celebrar este año.

En febrero 2012, la Corte costarricense ordenó el embargo de los US$600.000 que la compañía minera Infinito Gold Ltd, depositó como garantía ambiental para el Proyecto Minero Crucitas. Esta garantía servirá para intentar restaurar a su condición original, el área talada en la etapa de exploración. Desde noviembre de 2011 la Corte había ordenado el cierre permanente del Proyecto por los potenciales impactos ambientales y las violaciones legales que demostraron los ambientalistas costarricenses.

Esta situación sienta un importante precedente en América Latina, donde la administración de los recursos ambientales ha luchado por seguirle el paso al rápido crecimiento de la industria minera.

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A man inspects a mining exploration site in Costa Rica. | Un hombre inspecciona un sitio de exploración minera en Costa Rica. | Photo Credit: Anonymous

El embargo y la sentencia se dieron gracias al trabajo de grupos de la sociedad civil costarricense quienes argumentaron la posible destrucción de áreas de bosque, la potencial contaminación de fuentes de agua en Costa Rica y su vecina Nicaragua, además de afectaciones al turismo y fuentes de trabajo. Adicionalmente, desde 2008 AIDA había distribuido un escrito con argumentos de las potenciales obligaciones internacionales que violaría el país de desarrollarse el Proyecto tal y como estaba concebido.

Esto evitó repetir la experiencia de Bellavista, una mina de oro a cielo abierto desarrollada alrededor del 2000 en el pintoresco sector turístico de Miramar; a pesar de las advertencias realizadas por mineros expertos sobre la inestabilidad sísmica y posibles derrumbes. El promotor del proyecto cerró la mina en el 2007 por preocupaciones relacionadas con el movimiento de tierras, sin embargo no se le obligó a limpiar o restaurar el área.

El cierre de Crucitas es un signo de avance en Costa Rica, donde el ecoturismo es un gran negocio. Este fallo sienta un precede en América Latina de cómo se puede evitar el desarrollo de proyectos mineros antes de realizar exploración alguna, cuando son evidentes las potenciales amenazas al ambiente o los derechos humanos.

Su contribución a AIDA nos ayudará a continuar apoyando el desarrollo con responsabilidad que protege los ecosistemas invaluables,

¡Gracias!

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