lunes, 22 de octubre de 2012

Frei Betto: El sujeto se vuelve objeto; el objeto, sujeto

Frei Betto
Escritor y asesor de movimentos sociais
Adital
 
El consumismo neoliberal genera hoy una hazaña que deja a los filósofos más confundidos: el sujeto humano pasa a la condición de objeto y el objeto -la mercancía- ocupa la condición de sujeto.
El consumo ya no viene determinado por la necesidad, sino que depende, sobre todo, del sueño del consumidor de alcanzar el estatus del producto. O sea que la mercancía tiene marca, estatus, agrega valor a quien la lleva. Al obtenerla el consumidor se deja poseer por ella. El valor que ella contiene, creado por los medios publicitarios y por la moda, emana e impregna al consumidor.

En el universo consumista si alguien desea ser bien aceptado entre sus pares, en el círculo social que frecuenta, necesita equiparse con todos aquellos artículos de lujo que lo revisten de una aureola capaz de señalizar socialmente el alto nivel de su estatus. Ay de él si no ostenta ciertas marcas de auto, de reloj o de ropa. Ay de él si no frecuenta ciertos restaurantes de postín. Ay de él si no viaja en clase ejecutiva a Nueva York, París o una isla del Pacífico considerada como la nueva Meca.

En caso de que el sujeto se rehúse a ostentar la lista de objetos considerados refinados, corre el riesgo de ser excluido, rechazado del círculo social que establece como código de identificación cierto nivel mínimo de patrón de consumo.

En resumen, el sujeto pasa a ser tratado como objeto. Doblemente objeto: por asimilarse a la mercancía y por ser rechazado por sus pares. Porque en el sistema consumista sólo es aceptado quien transita sin pudor alguno por el universo del lujo y de lo superfluo.

Ese proceso de deshumanización estimula la obsolescencia de las mercancías. Ahora se produce para atender, no a unas necesidades, sino a un sueño, a un deseo, a un ansia de alpinismo social. Un producto adquirido hoy -auto, ordenador, ipad- estará obsoleto mañana.

Si quiere, usted puede empeñarse en conservar el mismo equipamiento electrónico, suficiente para sus necesidades actuales. Pero todos a su alrededor constatarán su anacronismo. Usted perderá su identidad de tribu, que avanza hacia la adquisición de mercancías más sofisticadas, con un diseño más perfeccionado.
El único modo de ser aceptado por la tribu es revestirse de los mismos objetos que, actuando como sujetos, le rescatan del oscuro y mediocre universo del común de los mortales.

Esta inversión del sujeto humano hecho objeto y del objeto transformado en ‘humano’ e incluso ‘divino’, se logra a través de la publicidad, que no hace distinción de clases. El llamado es igual para todos. Tanto el millonario en su avión particular como el joven semianalfabeto de una favela sufren el mismo impacto publicitario.

La diferencia está en que el primero tiene fácil acceso a los nuevos iconos del consumismo, mientras que el joven absorbe los iconos en su mochila de deseos y reconoce hasta qué punto es descartado y descartable por no revestirse de objetos que imprimen valor a las personas. De ahí la frustración y la rebeldía.

La frustración puede ser compensada por la saludable envidia de los espectadores del brillo ajeno: lectores de revistas de celebridades e internautas que navegan atraídos por el canto de sirena de sus ídolos. La rebeldía lleva al crimen: "No soy como ellos, pero tendré, a sangre y fuego, lo que ellos tienen”.

¿Habrá límites para la obsolescencia? ¿Algún día la superproducción hará que la oferta sea asustadoramente superior a la demanda? Todo indica que no. Hace mucho que la industria aprendió que el consumidor es irracional, que no se mueve por principios sino por efectos. Es la emoción la que lo hace aproximarse al mostrador.
Aprendió también a lograr que la producción acompañe a la concentración de la riqueza. Ya no se fabrican autos populares. Quienes adquieren más vehículos son las familias que ya poseen al menos otro.

Ahora, en la posmodernidad, las personas ya no se relacionan, no se conectan. Los encuentros no son reales sino sólo virtuales. Ya no se vive en sociedad sino en red. Nadie es excluido sino borrado.

La intimidad cede su lugar a la extimidad, en expresión de Bauman. Hace desmoronarse los muros de la privacidad. Hasta el punto de que las personas se vuelven mercancías vendibles, escaparates ambulantes que esperan ser admiradas, deseadas, envidiadas y codiciadas. De ahí la onerosa inversión en gimnasios, cosméticos, cirugías plásticas, etc. Muchos buscan ansiosos ser objeto de deseo. Porque su autoestima depende de la mirada ajena. Y el mercado sabe manipular muy bien esa baja autoestima.

Frei Betto es escritor, autor de "La obra del Artista. Una visión holística del Universo”, entre otros libros. 

Edgardo Lander: "La capacidad del sistema financiero de imponer condiciones a los estados reduce la democracia"



(Rodolfo Garavaglia) -
Por PABLO MONTANARO
 
Neuquén > Hace algo más de dos años el sociólogo venezolano Edgardo Lander aventuraba que quizás el capitalismo sea el fin de la vida humana. Días atrás estuvo en la ciudad de Neuquén donde fue uno de los conferencistas del Encuentro Internacional del Colectivo Modernidad/Colonialidad, evento organizado por la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional del Comahue  y el Centro de Estudios y Actualización en Pensamiento Político, Decolonialidad e Interculturalidad. En esa oportunidad, este profesor de 70 años y titular de Ciencias Sociales de la Universidad Central de Venezuela centralizó su disertación sobre la actual crisis civilizatoria y el análisis sobre el futuro, tema sobre los que conversó con La Mañana de Neuquén.

¿Cuáles son los factores que lo llevan a sostener que estamos viviendo una crisis civilizatoria?

Hay una profunda crisis civilizatoria que se ha hecho hegemónica en el planeta y sigue profundizándose la lógica del “buen vivir” y un imaginario de qué se entiende por vivir bien o felicidad del bienestar que está asociada a la acumulación de bienes materiales. De forma tal que hay una expectativa de que pueda haber una abundancia material continuada sin fin. Y existe, en términos muy básicos, una contradicción entre el hecho de que el planeta es limitado y un crecimiento sin fin.

Si el planeta es limitado en términos de su capacidad productora de vida, en su cantidad de agua, en su capacidad productora de las condiciones que hacen posible la vida, obviamente para tener una existencia continuada en el planeta hay que aprender a vivir dentro de esos límites, si no aprendemos a vivir dentro de esos límites y seguimos en esta carrera desenfrenada y destructiva, entonces nos encontramos en la imposibilidad de continuar.

¿Por qué sucede esto?

En primer lugar, en una forma que en las últimas décadas se ha acelerado extraordinariamente, la emisión de gases de efecto invernadero, por ejemplo, cualquier medida que uno tome de cualquier cosa, obviamente el salto ha sido muy extraordinario, precisamente en tiempos en que se reconoce que esto está pasando porque antes no se problematizaba, pero hoy no sólo se problematiza sino que se documenta, y sin embargo no se presentan medidas. Y en segundo lugar está ocurriendo en condiciones de extrema y creciente desigualdad. Por lo tanto, esta combinación de destrucción y eventos catastróficos climáticos cada vez más frecuentes, procesos de desertificación que hacen imposible la reproducción de la agricultura en comunidades campesinas de millones de personas, junto con esta desigualdad creciente hace que también estemos en un mundo más militarizado, más violento y esto no es sostenible.

En otras palabras, los indicadores del agotamiento de la actual civilización de modelo productivista están a simple vista. Está documentado de manera muy amplia el hecho de que la capacidad de carga del planeta está siendo explotada más allá de su capacidad de recuperación.

Hoy diversas organizaciones no gubernamentales, poblaciones, entre otras, denuncian y enfrentan esta situación, ¿cuál es la perspectiva de una posible salida a estas problemáticas?

La preocupación principal es si lograremos tener tiempo para detener esta maquinaria destructiva antes de que nos devore. Hay, efectivamente, resistencia campesina, indígena. Por otra parte, estos procesos destructivos son todos territoriales, ocurren en algún lugar, no es una cosa abstracta, y en los territorios hay gente. Y en múltiples y diversos territorios se está produciendo una resistencia. Resistencia a la minería a cielo abierto, resistencia al petróleo, resistencia a la destrucción de los glaciares, resistencia al glifosato. Resistencias que de algún modo van generando la capacidad de frenar esa maquinaria desbordada, como si fuera una locomotora sin conductor que sigue acelerando, y la exigencia ética de la vida pasa por detenerla.

Sin duda que la crisis que vive Europa ha profundizado esta realidad.

La crisis en Europa está muy vinculada por varias cuestiones. Primero, porque en el emparentamiento histórico que hubo entre la democracia liberal y el capitalismo, sobre todo en Europa, y con el Estado de bienestar social, esa fue una posibilidad histórica de un momento muy peculiar de la historia que tuvo que ver con una fase en la cual Europa occidental logró apropiarse de la capacidad productiva, de bienes y de trabajo del conjunto del planeta en una forma profundamente desigual.

Entonces, en una sociedad de abundancia relativa fue posible construir una sociedad más democrática, más equitativa, se construyó el Estado de bienestar social, una cultura de derecho en relación a educación, salud. En los reacomodos que se están dando actualmente, la capacidad de estos países de seguirse apropiando tan desigualmente de la capacidad de carga del planeta dejó de ser real. Por lo tanto, entramos en una situación en donde hay que repensar la abundancia y repensar en la restricción, y en esas condiciones se está produciendo una reacción antidemocrática.

¿Cómo es esto?

La forma de los sistemas políticos, sobre todo europeos, es muy violenta, es una situación en la cual la capacidad del sistema financiero de la banca de imponer condiciones a los estados va reduciendo la democracia que la está convirtiendo en una farsa. No es que hay un análisis crítico de alguna revista especializada sino que un presidente dice: “Tomamos esta medida porque fue exigida por los mercados”.

¿Y América Latina cómo se prepara en el marco de esta resistencia?

Lamentablemente en esta década progresista de cambios en América Latina el tema del modelo productivo como tal no ha estado en el centro del debate como debería haber estado. El extractivismo y la lógica primaria exportadora del mercado internacional en todos los países de derecha y de izquierda se ha acentuado en diferentes productos. En el caso de la Argentina la soja, en otros países la minería, en Venezuela el petróleo.

Hay una tendencia a aprovechar la coyuntura internacional de una demanda china muy acelerada con una elevación de precios. Pero esa oportunidad lo que está reafirmando es una lógica que hace mucho más difícil después salir de ella. Porque el extractivismo y el rentismo no son sólo son fenómenos económicos, sino políticos, culturales, institucionales y de una lógica de sentido común compartido, de un establecimiento de inmensas inversiones de hiperestructuras que quedan en el tiempo y obligan a seguir utilizando.

Se están tomando decisiones que parecerían coyunturales pero no lo son, sino que son decisiones que terminan teniendo impacto a muy largo plazo. En la Argentina, a medida que haya una continuidad del modelo de la soja transgénica se empiezan a ver los efectos más amplios de glifosato y en que la producción de alimentos empieza a verse reducida porque es más rentable producir soja que cualquier otra cosa.

Su visión es pesimista.

Uno no gana nada con un optimismo florido, uno no gana nada en no reconocer los problemas porque los problemas están, los queramos ver o no. Diagnosticar con acidez los problemas forma parte de reconocer la necesidad de acción, de articulación, de cooperación y de divulgación, de cambio cultural, y desde mi punto de vista le coloca la adecuada urgencia. Tenemos problemas de urgencia porque no es sólo las cosas que habría que hacer sino lo que habría que hacer de forma urgente.


Ecuador: Construir una economía solidaria, ese es el reto

Alberto Acosta,
Candidato presidencial de la Unidad Plurinacional
Quito, 21 de octubre de 2012



Un nuevo régimen de producción debe basarse en la norma constitucional que establece la Economía Social y Solidaria, y que postula que el centro de toda actividad económica es el ser humano. Pero no desde una visión antropocéntrica, pues el ser humano no solo debe ser solidario con los demás, sino que debe vivir en armonía con la Naturaleza, de la que forma parte. Ese es el punto de partida del Buen Vivir.

Igualmente, como dispone la Constitución de Montecristi, hay que asegurar una relación armónica entre Estado, mercado y sociedad. Al mercado hay que civilizarlo, para lo cual el país ya cuenta con una ley para el control de las operaciones oligopólicas y monopólicas; ley que, sin embargo, carece de poder para afectar las estructuras monopólicas y oligopólicas existentes, que frenan el desenvolvimiento dinámico de la economía. Por ello es importante romper con aquellas estructuras que hegemonizan el aparato productivo.

Si bien es cierto que al mercado hay que controlarle para que este no se sitúe por encima de los intereses de la ciudadanía y las personas, no creemos que sea función del Estado entrometerse en la vida cotidiana de la ciudadanía. El Estado no puede ser una suerte de inspector de las costumbres ciudadanas que prohíbe las conductas sociales (como sucede con la prohibición de vender cerveza los domingos o peor aún que un burócrata estatal pueda decidir cuál debe ser la vocación profesional de la juventud que quiere estudiar en una universidad).

Necesitamos una sociedad fuertemente organizada, que ciudadanice al Estado y civilice el mercado. De igual manera, consideramos que la acción productiva en el país no debe destruir la Naturaleza, pilar sobre el cual se sustenta nuestra economía y el futuro de las generaciones venideras. En tal sentido, también es indispensable fortalecer el control del Estado sobre los recursos naturales no renovables. Sin embargo, estamos convencidos de la inviabilidad económica, social y ambiental de la megaexplotación minera.

El grueso del cambio político, institucional y socioeconómico se generará desde las pequeñas y medianas empresas, así como desde aquellas organizaciones cooperativas y comunitarias, sobre la base del uso intensivo de fuerza laboral y tecnologías intermedias, insumos local-regionales, concentrando la producción para cubrir prioritariamente las necesidades del mercado interno y garantizar la soberanía alimentaria nacional.

Las prácticas monopólicas y oligopólicas concentran riqueza en pocas empresas grandes, que no son las mayores generadoras de empleo y, muchas veces, en lugar de fomentar la producción, promueven las importaciones. En el Ecuador las pequeñas y medianas empresas (PYMES) generan la mayor cantidad de empleo: 75%, y participan de un 56% de las ventas nacionales. Las pequeñas empresas, a pesar de ser el 95% del universo de empresas existentes en el país y las generadoras del 44% de empleo nacional, apenas venden el 16% de los productos que se comercializan en el mercado, lo cual refleja asimetrías que han de ser urgentemente corregidas en nuestra economía.

Los grandes empresarios tratan de acumular aplastando a otros; por ejemplo, buscan maximizar las utilidades por cada unidad de producto que se coloca en el mercado, cuando bien podrían aumentar sus utilidades incrementando la masa de productos que colocan en el mercado. Lo que se aplica especialmente al gran capital extranjero, que no sólo desnacionaliza la economía, sino que -al menor indicio de crisis- emigran al exterior, desestabilizando la economía doméstica.

La tarea es fabricar la mayor cantidad posible de productos localmente, para generar mayor valor agregado y evitar la monodependencia del producto estrella del momento (cacao, banano, petróleo). La opción es crear un aparato productivo vigoroso basado en las pequeñas y medianas empresas del campo y la ciudad, las cuales, además de generar puestos de trabajo, son las que -con frecuencia- menos problemas ambientales generan. El eje de este universo de emprendimientos estaría complementado por las unidades productivas comunitarias, asociativas y cooperativas, así como las unidades económicas populares, con los que se debe construir otra economía, una economía solidaria como manda la Constitución de Montecristi. 

Es decir una economía inclusiva, sustentable y generadora de puestos de empleo dignos. Proponemos, en suma, incentivar a los que nunca han sido incentivados. Hay que pasar de una economía oligopólica a una economía reciproca y solidaria.

Este sector económico popular y solidario está compuesto por el conjunto de formas de organización económica-social en las que sus integrantes, colectiva o individualmente, desarrollan procesos de producción, intercambio, comercialización, financiamiento y consumo de bienes y servicios. Estas formas de organización económica solidaria incluyen cooperativas de producción, de consumo, de vivienda y de servicios, así como a las asociaciones y organizaciones productivas comunitarias. A estas se suman las organizaciones del sector financiero popular y solidario, que tienen a las cooperativas de ahorro y crédito como uno de sus principales pilares, así como a las cajas solidarias y de ahorro y los bancos comunales.

Estas organizaciones realizan sus actividades basadas en relaciones de solidaridad, cooperación y reciprocidad y ubican al ser humano como sujeto y fin de toda actividad económica por sobre el lucro, la competencia y la acumulación de capital. De esta manera se romperá con toda forma de paternalismo, asistencialismo o clientelismo, por un lado, y por otro, con toda forma de concentración y acaparamiento; prácticas que han dominado la historia del país: migajas para el pueblo y la gran torta para las minorías. Aquí lo que cuenta, a demás, tal como dispone el mandato constitucional, es que el ser humano debe vivir en armonía con la Naturaleza, buscando, individual y comunitariamente, la construcción el Buen Vivir o Sumak Kawsay.

El Estado tendrá que invertir y generar las condiciones que dinamicen a los pequeños y medianos productores, porque son grupos con una enorme productividad del capital. Un pequeño productor con una pequeña inversión le saca mucho más rédito al dólar invertido que el dólar invertido que los grandes grupos de capital y las transnacionales que operan en el país. 

El problema de ese productor es que no tiene capacidad de acumular. Gana muy poco y vive en condiciones de inmediatez económica, subordinado al gran capital. Muchas veces tampoco tiene una adecuada preparación profesional y formación técnica,  dado que el Estado no se ha preocupado en materia de preparación para la adecuada gestión de este sector productivo. Para lograr este propósito se requiere de la cooperación interempresarial de estas empresas de propiedad social, en lo que se denominan “Distritos Industriales”, como lo que existe de alguna manera ya en Atuntaqui. Hay que profundizar y ampliar esta experiencia, haciendo que las diversas empresas compartan costos fijos (maquinaria, edificios, equipo, tecnologías, etc.) y aprovechen así economías de escala, lo que les aseguraría una mayor productividad. (Supervisando, por cierto, que se produzca sin afectar al medio ambiente.)

Por ello se vuelve impostergable una repotenciación del aparato productivo del país, superando su sometimiento colonial extractivista, que en la actualidad se consolida de la mano del gobierno de Rafael Correa. Tenemos que superar la herencia colonial extractivista . Esta decisión exige el ejercicio soberano sobre la economía, la desprimarización de su estructura, el fomento y la inversión para la innovación científico-tecnológica, la inclusión social, la capacitación laboral y la generación de empleo abundante y bien remunerado. Este último punto es crucial para evitar el subempleo, la desigual distribución del ingreso, el desangre demográfico que representa la migración, entre otras patologías inherentes al actual modelo primario-exportador de acumulación.

La transformación del bono de desarrollo humano en un bono productivo y comunitario puede ser una interesante opción para superar visiones simplemente asistencialistas. Esto se completará con un sistema de abastecimiento del desayuno y almuerzo escolar proveniente de la producción de los campesinos y los pescadores locales, sobre todo de los propios cantones: basta de seguir favoreciendo a los grupos monopólicos, como lo hace el actual gobierno. Los resultados de esta decisión son evidentes: fortalecimiento del aparato productivo campesino y pesquero artesanal, así como mayor generación de empleo y la configuración de núcleos de producción de bienes de consumo de masas, en el marco de una ampliación del mercado doméstico y autodependiente que debilite las redes de distribución y comercialización que benefician a los grupos monopólicos en detrimento de los demás productores. (Sobre esta propuesta se puede consultar la nota del 14 de octubre del presente año)

En un presupuesto de más de 26 mil millones de dólares el financiamiento de estas propuestas solo requiere voluntad política: la pobreza se supera con producción y empleo, así como con redistribución de la riqueza y una nueva institucionalidad que vele por la justicia, la no-discriminación y la descentralización política y económica!!!

Hacia la desconcentración de la riqueza

Un documento interno del mismo gobierno sintetiza lo que el Ecuador ha vivido en estos últimos años: “nunca antes los grandes grupos económicos estuvieron mejor y los excluidos estuvieron menos peor”. A pesar de lo cual no se entiende el problema de fondo, que radica en el hecho de que mientras se mantenga la brecha, estos grupos en extremo explotados nunca podrán estar realmente mejor. En realidad estos grupos no están marginados: están incorporados a la lógica capitalista del gran capital, viven de las migajas que les deja su dinámica sobre-concentradora y sobre-explotadora heredada del pasado neoliberal y no transformada por las políticas públicas desarrolladas durante el actual gobierno.

La lucha contra la pobreza no puede hacerse sin combatir la excesiva concentración del ingreso y de la riqueza. En nuestro país persisten estructuras heredadas de las épocas colonial, oligárquica y neoliberal, que generan prácticas oligopólicas y monopólicas. Esta es la realidad del país.

Las principales actividades económicas están concentradas en pocas empresas: el 81% del mercado de las bebidas no alcohólicas está en manos de una empresa, una empresa por igual contrala el 62% del mercado de la carne, cinco ingenios (con tan solo tres dueños) controlan el 91% del mercado del azúcar, dos empresas el 92% del mercado del aceite, dos empresas controla en 76% del mercado de los productos de higiene y así podríamos seguir enumerando uno por uno cada sector productivo y comercial. Las ganancias de los cien grupos más grandes se incrementaron en un 12% entre 2010 y 2011, superando la astronómica cifras de 35.000 millones de dólares. En este sentido es necesario destacar que las utilidades de los grupos económicos en el período 2006-2010 fueron (serían) 364% superiores al período 2004-2006. Las utilidades de los grupos económicos pasaron (habrían pasado) de 529 millones de dólares en 2006 (antes de Correa) a 1.830,4 millones de dólares en 2010 (con Correa).

Si bien, por mandato constitucional, la banca y los banqueros ya no pueden tener propiedades ajenas a las relativas a su actividad específica, el crecimiento acumulado de utilidades de la banca privada en el período 2007-2009 (durante el gobierno del presidente Rafael Correa) fue 70% superior al período 2004-2006 (gobiernos neoliberales). En el ejercicio del año fiscal 2011, dada la liquidez registrada por la economía ecuatoriana, el sector bancario incrementó sus utilidades en 52,1% en relación al año anterior. Entre enero y diciembre de 2011, la banca privada registró utilidades superiores a los 400 millones de dólares; en estos cinco años de gobierno de Rafael Correa el promedio anual de dichas utilidades bordea los 300 millones.

No es simple transformar esta situación, pero es indispensable apostar por un proceso productivo que supere la actitud rentista, ociosa y parasitaria de muchos de estos grupos económicos. Lo que requiere una nueva perspectiva y una creciente movilización desde las bases, partiendo de lo local -trabajando estrechamente con los gobiernos descentralizados- para ir avanzando a lo regional y los espacios mayores.

Con la vista puesta en las dinámicas globales, expandiendo los mercados internos y potenciando la integración regional, postulamos una estrategia que impulse procesos productivos y de desarrollo tecnológico propios. El imaginario colectivo, en consecuencia, estaría dirigido a Valorar lo Nuestro, conduciendo a un desenvolvimiento autocentrado, desde dentro para y por los de dentro, con los recursos y patrones de consumo propios para recuperar las autonomías local-regionales, asegurar la inclusión social y reforzar las identidades socioculturales de los espacios descentralizados.

Tengamos presente que las empresas pequeñas y medianas, así como los emprendimientos asociativos, solidarios, de propiedad social, cooperativos y autogestionarios, son las que más invierten en el país, asumen los mayores riesgos y desafíos, generan empleo y contribuyen a incrementar la riqueza nacional. Fomentando a este segmento de la economía será factible reducir la brecha socioeconómica entre ricos y pobres. No tenemos solo un problema de mucha pobreza, tenemos un problema de unas pocas pero grandes riquezas.

Si a este empeño se suman las otras empresas, tanto mejor. Ese es uno de los retos del momento, impulsar un gran acuerdo nacional productivo, sustentado especialmente en los emprendimientos solidarios, así como en las pequeñas y medianas unidades productivas del campo y la ciudad.

Sin embargo, esto no será suficiente, pues se requerirán medidas que conduzcan a una consecuente redistribución, no sólo de los ingresos, sino especialmente de la riqueza excesivamente concentrada, que abarca gran parte de los activos sobreconcentrados: inmuebles, acciones y grandes predios agropecuarios, así como las tierras yermas, las concesiones minero-petroleras y otras. Para lo que habría que completar la reforma tributaria que cargue el peso del gasto público sobre los grandes concentradores de capital (impuestos directos sobre la propiedad y las utilidades), a la vez que reduciremos los impuestos indirectos que paga la ciudadanía y aquellas excesivas cargas tributarias derivadas del Código de Ordenamiento Territorial, que han incrementado inequitativamente el costo de las transacciones. A dichas medidas, ha de sumarse una adecuada redistribución de tierras agropecuarias e inclusive urbanas, especialmente aquellas que son usadas para fines puramente especulativos o que permanecen improductivas.

Hacia la construcción del Sumak Kawsay o Buen Vivir

Lo planteado configura nuestra propuesta de transición, no a mejorar el capitalismo que hemos tenido hasta hoy -como dice Rafael Correa- sino para colocar las bases que nos encaminen al Buen Vivir o Sumak Kawsay.

El Sumak Kawsay es una nueva concepción del sistema de vida basado en las prácticas cotidianas y tradicionales de los pueblos y las nacionalidades. No es una simple alternativa de desarrollo, es una alternativa al desarrollo. Por lo tanto es un modelo de organización económica, política y de bienestar que se asienta en los principios de reciprocidad, complementariedad, interdependencia, solidaridad, integralidad, estabilidad y armonía del ser humano con la Pacha Mama para la reproducción sostenible y orgánica de la vida. Es un sistema integral de organización que interrelaciona las esferas política, económica, jurídica, social, étnica, ambiental, cultural y generacional.
 
El país debe superar el actual modelo hegemónico de desarrollo, basado en la acumulación desenfrenada e ilimitada de capital, en la sobreexplotación de la fuerza de trabajo y de la Naturaleza, y en la subordinación a los requerimientos de la globalización y su agente, el gran capital transnacional y sus aliados nacionales. Sus consecuencias han sido devastadoras para el ser humano y la Naturaleza. La sociedad debe subordinar a la economía a fin de que sirva al ser humano, no al capital.
 
El trabajo decente y el salario justo, así como el acceso equitativo a los factores de producción, viviendo en armonía con la Naturaleza, constituyen las medidas más acertadas para reducir la pobreza y la desigualdad, bases esenciales para asegurar un desenvolvimiento sustentable y autodependiente de la economía nacional.
 
Por un nuevo mundo, por un cambio estructural verdadero y no solo bellas palabras e intenciones.-
 
¡Todo para la Patria, nada para nosotros!
 
Alberto Acosta
Candidato presidencial de la Unidad Plurinacional 

 

Asia desafía a Estados Unidos en ranking de mejores universidades

Estudiantes universitarios
La inversión en educación superior ha caído en Estados Unidos y se ha incrementado en los países asiáticos

Entre las 200 mejores universidades del mundo, de acuerdo con el ranking de instituciones de educación superior elaborado por la publicación Times Higher Education, figura sólo una entidad latinoamericana, la Universidad de Sao Paulo, mientras que las instituciones chilenas salieron del grupo de las 400 más destacadas, lo mismo que las entidades de Argentina.

El top 10 sigue siendo dominado por universidades estadounidenses (Caltech, Stanford, Harvard, Massachussets, Institute of Tecnology Princeton, Berkeley y Chicago) e Inglaterra (Oxford, Cambridge, Imperial College London), países que también brillan en la lista por la cantidad de instituciones que están entre las 200 mejores: Estados Unidos tiene 76, Reino Unido 31 y Holanda 12.

Sin embargo, la supremacía estadounidense está siendo progresivamente amenazada por las entidades asiáticas, lo que se debería, según el análisis, a los recortes en el aporte público a esas entidades. Así, este año la Universidad de California en Davis cayó del puesto 38 al 44; la estatal de Pennsylvania, del 51 al 61; la de Massachussets, del 64 al 72; y la estatal de Arizona, del 127 al 148.

En contraste, la asiática mejor ubicada, la Universidad de Tokio (Japón), subió del puesto 30 al 27; la Nacional de Singapur, del 40 al 29; la de Hong Kong se mantuvo en el 35; la de Pekín (China), del 49 al 46; y la de Tsinghua escaló del puesto 70 al 52. “En 2010, los fondos de investigación de las universidades en China alcanzaron los 12 millardos de dólares, superando al Reino Unido en 11 millardos, y la cifra crece a razón de 15% anual”, destacó Karan Khemka, de la consultora Parthenon.

José Joaquín Brunner, investigador del Centro de Políticas Comparadas de Educación de la Universidad Diego Portales, afirma que estas cifras hay que mirarlas con cautela. “No es cierto que Harvard haya dejado de ser mejor porque pasó del segundo al cuarto lugar. No hay sustento empírico para decir eso”, sostiene.

“Efectivamente, Caltech es una excelente institución de investigación, con 2.200 alumnos, la mitad de ellos de posgrado en ciencias e ingeniería y con una relación profesor-alumno de uno a tres. Por eso no se la puede comparar con Harvard, que es una universidad completa, con Medicina, todas las humanidades y ciencias sociales, que tiene muchísimos centros de pregrado, además de posgrado y editoriales”.

Opiniones de expertos

Brunner agrega que se trata de listas elaboradas sobre la base de una encuesta que se envía a 16.000 académicos de todo el mundo, así como número de investigaciones, citas en estudios, relación profesor-alumno e innovación, entre otros aspectos, donde la cantidad de millones con los que se cuentan no son banales.

“Entre apenas 2 universidades estadounidenses, que suman 25.000 alumnos, mueven en inversión 5 millardos de dólares, lo mismo que todo el sistema de educación superior chileno con 1,1 millones de alumnos”, ejemplifica Brunner.

Luego, agrega, hay una pregunta implícita: ¿Sería justo que Chile –o cualquier otro país– concentrara su inversión sólo en dos planteles para que destaquen en estas listas de las mejores del mundo, o preferiblemente debe enfocarse en mejorar la educación superior en su conjunto? Brunner cree que la segunda posibilidad es la mejor, desde el punto de vista de la equidad y del desarrollo del país.

Las latinoamericanas

La Universidad Estatal de Sao Paulo fue la latinoamericana mejor situada: pasó del lugar 178 al 158. Luego se ubicó la también paulista Universidad de Campinas en el grupo de las que están entre los puestos 251 al 275.

En el ranking, además, logró entrar la Universidad de los Andes de Bogotá, Colombia, que se sitúa entre los puestos 351 al 400.

Un dato importante al respecto lo da Karan Khemka, de la consultora Parthenon: “Brasil gasta 13 millardos de dólares al año en fondos para la investigación de sus instituciones académicas”.

José Joaquín Brunner también destaca ese aspecto y agrega que las dos universidades brasileñas situadas en el ranking son ultraselectivas y tienen una estructura de gastos similares a una universidad europea.

Empresas chinas trasladan producción a sureste Asia por costes salariales

Pekín, 22 oct (EFE).- El aumento de los salarios en China y la caída de las exportaciones han motivado que los fabricantes chinos comiencen a trasladar su producción a naciones del sureste asiático como Vietnam, Indonesia y Malasia.

El portal china.org, que cita a una fuente oficial del Ministerio de Comercio, indica hoy que en los sectores textiles un tercio de las empresas manufactureras trabajan "bajo una presión creciente" y ya han transferido parte o la totalidad de su producción fuera de China, buena parte a países miembros de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN).

El "fenómeno es básicamente positivo" y se encuentra en "línea con el compromiso del Gobierno para mejorar el poder de la industria y cambiar el modelo económico de crecimiento de China", aunque se pierdan empleos a raíz del traslado, señaló el portal.
La subida entre un 15 y un 20 por ciento de los salarios en los últimos tiempos ha llevado a la bancarrota a varias compañías chinas y ha impuesto un aumento del 20 % en los sueldos mínimos de 16 provincias chinas.

Esto se ha sumado a la caída de las exportaciones hacia la Unión Europea y EEUU y a los requisitos del Plan Quinquenal chino, que obligan a mejorar la calidad de la producción, para reducir los márgenes de ganancia de los empresarios, que buscan reducir costes con la mudanza de sus plantas a terceros países.
En 2011, el sueldo medio entre los trabajadores de fábricas en Vietnam era de 600 yuanes (96 dólares), el equivalente al sueldo en localidades sureñas chinas como Dongguan hace diez años.

No obstante, los analistas consideran que las ventajas salariales no durarán mucho tiempo.
"La ventaja (de los costos laborales de producción) en los países del sureste asiático sólo durará unos años (...) Hace 10 años muchas industrias de Hong Kong y taiwanesas se trasladaron al delta del río de la Perla (sur de China) para conseguir mano de obra barata, pero ahora podemos ver cómo han subido los costos", recordó el gerente de una compañía de ropa de Foshan (sur), Chen Jian, al portal.

La debilidad este año de las exportaciones chinas, que representan un 31 por ciento del producto interior bruto (PIB) del país, motivó que en los últimos meses Pekín emprendiera una serie de medidas de estímulo, como la adopción de varios tipos de desgravaciones fiscales.

Tras la puesta en marcha de esas medidas, en septiembre las ventas al exterior de China crecieron un sorprendente 9,9 por ciento con respecto al mismo mes del año anterior, la cifra más alta del año.

En lo que va de año, el comercio exterior chino ha crecido un 6,3 por ciento interanual, para totalizar los 345.030 millones de dólares en septiembre. El Gobierno se ha fijado el objetivo de un 10 por ciento de crecimiento de sus exportaciones para todo el año. EFE
 

Disminuyen oportunidades de empleo en región Asia-Pacífico: OIT


GINEBRA, 22 oct (Xinhua) -- Tanto la cantidad como la calidad de los empleos disponibles en los mercados laborales de Asia Pacífico han sido afectadas por el lento crecimiento económico, indica hoy un informe publicado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

De acuerdo con el informe titulado Actualización del Mercado Laboral Asia Pacífico Octubre 2012, Indonesia, Filipinas, Australia, Nueva Zelanda y Taiwan han experimentado una desaceleración importante en el crecimiento del empleo.

También señala que la mala calidad del empleo, que a menudo significa salarios bajos y acceso limitado a derechos y beneficios, constituye otro enorme desafío para la región.

Alrededor del 80 por ciento de los trabajadores de Nepal, la India y Pakistán trabajan de manera informal en el sector no agrícola y muchos de ellos son mujeres.

Al contar con la mayor población joven del mundo, las perspectivas del mercado laboral de la región para los jóvenes siguen siendo sombrías.

El informe muestra que uno de cada seis jóvenes está desempleado en Taiwan, Hong Kong, Filipinas y Nueva Zelanda. La juventud representa casi el 60 por ciento de la población desempleada en Samoa y 50 por ciento en Vanuatu.

"A menos que Asia aproveche el potencial pleno de las y los jóvenes, su búsqueda de prosperidad y desarrollo seguirá siendo esquiva", dijo Gyorgy Sziraczki, director en Vietnam de la OIT.
  
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Bruselas, 22 oct (PL) Es inaceptable que 25,5 millones de personas estén sin trabajo en la Unión Europea (UE), de las cuales el 22,7 por ciento son jóvenes entre 18 y 25 años, afirmó hoy la Comisión Europea.

Luego de conocerse los resultados de un estudio de la agencia especializada Eurofound, un comunicado del ejecutivo comunitario indicó que los que no tienen estudios, ni trabajo y carecen de capacitación le costaron al bloque unos 153 mil millones de euros en 2011.

Los jóvenes que integran esa generación perdida suman ya 13 millones 941 mil 264 y las pérdidas que generan por falta de productividad o mejor calidad de vida representan en la actualidad el 1,21 por ciento del Producto Interno Bruto europeo, señala el texto.

De acuerdo con Eurofound, esa cifra es bastante superior al 0,96 por ciento que representaban en 2008, cuando se desató la crisis.

La Comisión Europea expresó que es realmente preocupante un récord del 22,7 por ciento de desempleo en Europa en la población entre 18 y 25 años.

Sobre esa base las instituciones, los gobiernos, las empresas y los interlocutores sociales deben evitar su aumento, lo que sería un desastre económico y social, precisó.

Según el estudio estos ciudadanos sin empleo, educación ni capacitación le cuestan a la UE unos tres mil millones de euros por semana, y agrega que a partir de las crisis hay países donde esa generación perdida crece a pasos agigantados, por ejemplo en Grecia 54,7 y España 52,9 por ciento.

La crisis de deuda que aqueja a Europa -que comenzó en Grecia en 2010 y se ha extendido en la Eurozona para afectar duramente a Irlanda, Portugal, Chipre y España- ha mermado la confianza empresarial y la capacidad de las empresas para crear puestos de trabajo.

El desempleo en la zona de la moneda única podría superar los 19 millones de personas a principios del 2014, o alrededor de 12 por ciento de la fuerza laboral de la zona euro, según otro estudio de la consultora Ernst&Young, que predijo un paro del 27 por ciento en Grecia.

Recientemente el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, consideró indigno y una vergüenza para Europa que entre sus países miembros haya niveles de desempleo juvenil como el de España, por lo que pidió a Europa que actúe.

Al respecto, sugirió que el fondo de crecimiento dotado con 120 mil millones de euros, aprobado en el Consejo Europeo del pasado mes de junio se concrete y lleve imperativamente a más empleo para los jóvenes.

rc/crc

Perú: BASES DE CONACAMI PERÚ DEMANDAN TRANSPARENCIA Y DEMOCRACIA EN EL V CONGRESO

Las bases regionales de la Confederación Nacional de Comunidades del Perú Afectadas por la Minería, CONACAMI Perú, expresaron su profunda preocupación por los hechos que están afectando la imagen institucional de esta organización e instaron a los dirigentes que están cesando en sus cargos y a los miembros de la Comisión Organizadora del V Congreso a rechazar las agresiones y no dejarse manipular por partidos políticos que pretenden apropiarse de CONACAMI.

Fue durante la realización del V Encuentro Macro Regional Centro, realizado en Huancayo los días 20 y 21 de octubre, en el que participaron dirigentes y delegados de once de las trece regiones integrantes de CONACAMI. El Encuentro reunió a Delegaciones de Huánuco, Pasco, Junín, Huancavelica, Ayacucho, Ica y Lima, y a dirigentes de las regionales de Ancash, Cusco, Moquegua y Arequipa. También estuvieron presentes tres integrantes de la Comisión Organizadora del V Congreso y el presidente fundador de la organización.

La agenda comprendió la crítica situación orgánica y política de CONACAMI y la participación en el V Congreso Nacional, convocado para los días 27 y 28 de octubre. Luego de un amplio y autocrítico debate, los participantes llegaron a seis acuerdos sobre estos puntos:

1.       Ratificar la destitución y expulsión de Magdiel Carrión Pintado como presidente e integrante de CONACAMI, debido a la condenable agresión contra un dirigente nacional de la organización, hecho que es materia de investigación policial y judicial y que ha dañado la imagen de la institución.

2.       El V Congreso debe realizarse con las trece bases que legalmente están asociadas en CONACAMI, cada una de ellas con cinco delegados elegidos en asambleas regionales. Dentro de las delegaciones no podrán participar miembros de la misma familia, sino considerar a dirigentes comunales, regionales y nacionales. Las demás regiones que deseen participar deben hacerlo en calidad de delegados fraternos y sufragar sus propios gastos, en vista de la escasez de recursos con que cuenta esta actividad.

3.       Para garantizar la transparencia en el manejo de los recursos y en la participación de las delegaciones, la Comisión Organizadora del V Congreso debe administrarlos, con cargo a dar cuenta en un informe.

4.       Ratificar que CONACAMI es una organización democrática de los pueblos y comunidades afectadas por la actividad minera y rechazar todo acto ligado a la violencia, así como las campañas difamatorias que circulan en la red vía correos electrónicos. Quienes conocen la trayectoria de CONACAMI saben que ese no es su espíritu y que sus bases rechazan hechos de esa naturaleza.

5.       Instar a la Comisión Organizadora a garantizar la realización del V Congreso de CONACAMI con los delegados plenos en el marco del diálogo y la democracia. De surgir actos de violencia, manipulación o ataque a los miembros del Congreso, las trece bases acuerdan retirarse del mismo.

6.       La dirección del V Congreso de CONACAMI debe hacer bajo la conducción del Vicepresidente de la Organización, Luis Siveroni Morales, quien asume todas las funciones de la Presidencia por la separación del señor Magdiel Carrión Pintado.


Huancayo, octubre del 2012.
Encuentro Macro Regional Sur de CONACAMI Perú