martes, 25 de julio de 2017

Bolivia: ¡Libertad para Félix Becerra!



¡Libertad para Félix Becerra!
El caso que les voy a contar es indignante e intolerable para una persona decente. 
Conocí a Félix Becerra cuando trabajaba en ERBOL, a cuyas instalaciones llegó con su sombrero blanco de ala media y su poncho de colores sobrios a rayas. Supe que era quechua por su vestimenta, entonces nos pusimos a hablar y bromear en nuestra lengua madre.
Por aquel entonces, era el jilliri apu mallku del Consejo Nacional de Markas y Allyus del Qullasuyu (Conamaq). Muy crítico a Evo Morales y de acción: participó en la marcha en defensa del TIPNIS y exigió al Gobierno no entrometerse en las organizaciones indígenas. 
En una ocasión  denunció a funcionarios del Ministerio de Gobierno  de haber querido corromperlo. "Me ofrecieron de todo. Me dijeron: ¿Qué quieres para ti o para tu regional? Te vamos a dar, pero abandona  la marcha (del TIPNIS). ‘¿Quieres casa o auto? Mañana mismo te podemos dar’”, narró. 
Luego fue involucrado en el escándalo del Fondo Indígena. La Fiscalía lo acusó de incumplimiento de contrato y enriquecimiento ilícito en un proyecto para enseñar ruso en tres meses (junio, julio y agosto de 2012) a 18 jóvenes indígenas que iban a ser becados a Rusia.
Becerra no sabía de ese proyecto, había sido formulado en 2009. Llegó a Conamaq en enero de 2011 y se enteró del proyecto en abril de 2012, cuando el entonces director del Fondo Indígena, Daniel Zapata Pérez, y la encargada  de enseñar ruso, Elena Camargo, le urgieron dar curso al proyecto bajo la advertencia de que el convenio con la Embajada de Rusia estaba a punto de abortar.
Ante la insistencia, Becerra abrió, por ser representante legal de los fondos, una cuenta bancaria, a la que transfirieron desde el Estado 56.000 bolivianos como primera cuota. Apenas recogió el dinero, se lo entregó a Camargo. 
Félix tiene pruebas documentales que demuestran su versión: 1) Informe técnico financiero de Camargo sobre la ejecución y los gastos; 2) informe de los becarios; 3) informe de Zapata sobre el Convenio con Rusia; y 4) recibo que firmó con Camargo el día que le entregó los 56.000 bolivianos. 
Entre las pruebas testificales están las declaraciones de Julia Ramos, que en ese momento era administradora del proyecto en su condición de dirigente de "Las Bartolinas”; y de Roberto Coraite, que era control social por ser dirigente de la CSUTCB. 
Entonces, ¿cómo puede ser acusado de enriquecimiento ilícito si no se quedó con un solo centavo?  Es más, detectó irregularidades y evitó el desembolso de los restantes 538.400 bolivianos, que habían sido presupuestado para este curso. 
Sin embargo, el 13 de noviembre de 2015 fue aprehendido y un juez ordenó su detención preventiva en San Pedro. 
Félix, seguro de su inocencia, apeló y decidió quedarse en celdas de la Corte de Justicia, pagando 200 bolivianos por día a la espera de la audiencia de cesación. Pero ésta tardó más de 12 días en ser programada y como ya no tenía dinero, fue enviado a la cárcel. 
La mala suerte de Félix fue echada no por la corrupción, sino por su posición honesta ante el gobierno del MAS. Por ello, hoy es un preso político. Como prueba,  unos datos más: La Audiencia de Cesación de Detención Preventiva fue suspendida en cinco ocasiones.
La primera tenía que realizarse el 20 de noviembre de 2015, fue suspendida por falta de documentos. La segunda debía ser el 27 del mismo mes, no se realizó por falta de juez. 
La tercera fue programada para el 2 de diciembre, no se llevó a cabo porque un día antes su abogado César Montalvo Baldivieso constató que en el juzgado no existía el acta de la primera audiencia. 
La cuarta fue fijada para el 7 de diciembre; los custodios llevaron a Félix al Juzgado Anticorrupción de El Alto y la Audiencia era en La Paz. La quinta tenía que ser 14 de diciembre, se canceló porque la jueza se enfermó. 
Finalmente, la audiencia fue realizada el 29 de diciembre de 2015, en ella se ratificó su detención en San Pedro; el juez no tomó en cuenta como actividad laboral su trabajo de agricultor.   
El 23 de marzo de  2016 se solicitó nueva audiencia; hasta hoy no se programa. 
Si no te indignas por inocentes encarcelados, el siguiente puedes ser vos. 
¡Libertad para el preso político Félix Becerra!

Andrés Gómez Vela es periodista.